El Partido Popular de Vilagarcía acudió esta mañana a la llamada del vecindario de Trabanca Sardiñeira, que está cansado de la ausencia total del gobierno socialista de Alberto Varela a la hora de dar soluciones a sus problemas y muy preocupado por el progresivo deterioro de la zona a lo largo de los últimos años. “Non aparecen por aquí nin o alcalde nin o seu equipo. É un abandono total”, lamentan.
Hasta el lugar se desplazaron la portavoz municipal Ana Granja, los concejales Marcos Alcalde y Roberto Domínguez, la diputada autonómica Elena Suárez y diversos miembros del Grupo Municipal Popular como Lourdes Baños, Raúl Santamaría y Juan Andrés Bayón. Estos dos últimos en representación de Novas Xeracións de Vilagarcía. Todos ellos se reunieron con un grupo de vecinas que no dudaron en trasladarles sus quejas y mostrarles de primera mano los desperfectos que la ausencia de intervención municipal ha provocado.
En primer lugar, constataron la falta de espejos viales al menos en tres tramos de escasa visibilidad y de gran riesgo. Una cuestión sobre la que el Grupo Municipal Popular ya se ha manifestado en varias ocasiones durante la celebración de las sesiones plenarias en el Concello, reclamando sin éxito su colocación. El gobierno socialista ha hecho oídos sordos a esta problemática aún consciente del riesgo que la falta de visibilidad puede suponer para la seguridad vial.
A esto habría que añadirle además la mala conservación de las aceras (llenas de maleza y cuya estrechez imposibilita el tránsito por ellas) y de la mayoría de las carreteras, llenas de baches y huecos de notable profundidad causados por las fugas de agua y que, en muchos casos, han tenido que ser rellenados por los propios vecinos ante la inacción del gobierno local.
Aunque sin duda lo más lamentable es la situación en el que se encuentran el lavadero y su entorno más próximo. Un lugar que parece prácticamente abandonado debido a su mala conservación y en cuyas aguas difícilmente se puede ver el fondo debido a la gran cantidad de algas y verdín. La suciedad se agolpa a su alrededor y los charcos que se forman debido a las fugas de agua dificultan el acceso a la zona.
Un abandono del que tampoco se libran ni la plaza donde se celebran las fiestas, donde la maleza prácticamente ha devorado el hormigón de sus aceras y en la que los bancos de madera parecen de todo menos seguros; ni tampoco el parque que hace unos años construyó el Concello, cuyas estructuras están gravemente deterioradas a causa de la climatología y la falta de mantenimiento.
Según Ana Granja: “A situación na que se atopa Trabanca Sardiñeira é un exemplo máis da ausencia do goberno socialista de Alberto Varela nas zonas rurais de Vilagarcía, abandonadas e progresivamente condenadas a un total deterioro”.
Algo cuanto menos sorprendente, tal y como señala la portavoz municipal, “tendo en conta que o PSOE se comprometeu no seu programa electoral a facer un calendario de visitas constantes e periódicas ao rural para atender as súas demandas”. Tras seis años al frente de la alcaldía, esas demandas siguen sin ser atendidas y las visitas brillan por su ausencia.